sábado, 27 de marzo de 2010

El más grande de verdad...

Querido Ascenso
Juventud Antoniana:
el pionero del Interior

09:00|El equipo salteño fue el primer campeón del torneo Argentino A, categoría promocional a partir de la temporada 95/96. Al año descendió y en la temporada 97/98 volvió a ser uno de los mejores del país.

LOS CAMPEONES. El plantel de Juventud Antoniana que se consagró campeón del torneo Argentino A de la temporada 95/96.

Juventud Antoniana de Salta tiene el privilegio de ostentar el título de campeón del primer torneo Argentino A que otorgó un ascenso directo al Nacional B. Fue en la temporada 95/96 y lo consiguió tras una escandalosa final con Cipolletti de Río Negro, en la que centenares de hinchas rionegrinos invadieron el campo de juego cuando finalizó el partido y agredieron a los jugadores salteños.
La última restructuración que tuvo el fútbol argentino sucedió a mediados de 1995, con la creación del torneo Argentino A, como tercera categoría de Ascenso, y del torneo Argentino B como cuarta división, para los equipos indirectamente afiliados a la Asociación del Fútbol Argentino. Todas las ligas del Interior están afiliadas al Consejo Federal, que es el organizador del torneo y que a la vez es la entidad que tiene la afiliación de la AFA. Incluso, funciona en el mismo edificio de la calle Viamonte y, por supuesto, responde a los mandos superiores. El viejo torneo Regional, desde el que durante años se clasificaron los equipos del interior a los torneos nacionales entre 1967 y 1985, y posteriormente accedieron a los Zonales Sureste y Noroeste, se incorporaba definitivamente al circuito de ascensos y descensos del fútbol argentino. A partir de la temporada 96/97, el Nacional B pasó a llamarse Torneo Nacional de Primera B y el Torneo Argentino del Interior, definido como quinta categoría y paralelo a la histórica Primera D o división de Aficionados.
Del primer torneo Argentino A participaron 32 equipos, divididos en cuatro zonas regionales (Norte, Sur, Centro y Noroeste) de ocho equipos cada una. Juventud Antoniana participó de la Noroeste con Concepción de Tucumán, Central Norte de Salta, Juventud Alianza de San Juan, Desamparados de San Juan, Unión Santiago de Santiago del Estero, Villa Cubas de Catamarca y Andino de La Rioja. Antoniana terminó segundo en la zona con 24 puntos (7 triunfos, 3 empates y 4 derrotas), por detrás de Concepción y por encima de Desamparados. En la segunda parte de la temporada se enfrentó con Gimnasia de Concepción del Uruguay, Almirante Brown de Arrecifes, Desamparados, Concepción y Chaco For Ever. Fueron 10 fechas, todos contra todos y con revanchas. Antoniana ganó 6, empató 3 y perdió apenas un encuentro. En la otra zona quedó primero Cipolletti de Río Negro, quien compitió con Germinal de Rawson, Villa Mitre de Bahía Blanca, Independiente Rivadavia de Mendoza, Huracán de San Rafael y Mataderos de Necochea.

Juventud Antoniana y Cipolletti jugaron la primera final el 30 de junio de 1996, en Salta. El partido finalizó 0 a 0 y el empate pareció complicar al equipo salteño, que esa tarde formó con José Valdiviezo; Nelson Marín, Gustavo Vera, Martín Ligori, Juan Carlos Truyas, Raúl Olarte, Raúl Iturrieta, Carlos Rosas, Miguel Velarde, José Pereyra y Estaban Espeche. El técnico era Juan de la Cruz Kairuz, quien posteriormente fue denunciado por haber participado en grupos de tareas en el norte el país durante la última dictadura militar. Incluso Kairuz, que fue técnico de Atlanta, había salido en la película Siglo Bohemio, que conmemoró el centenario de Atlanta, y una de sus responsables, Mónica Nizzardo, después editó el video y borró la escena donde aparecía el entrenador.
La revancha se jugó el domingo 7 de julio en La Visera, como se conoce la cancha de Cipolletti. Con un gol de Espeche a los 20 minutos del segundo tiempo, Juventud Antoniana ganó 1-0 y se coronó campeón del torneo Argentino. Tras el silbato final de Oscar Sequeira, alguien abrió un portón que permitió el acceso al campo de juego de centenares de hinchas, y varios jugadores de Antoniana fueron agredidos. Tras la represión policial llegó la calma y el festejo salteño.
Tras participar del torneo Nacional de Primera B en la temporada 96/97, Antoniana descendió al Argentino A nuevamente. Entonces, con Pablo Comelles como entrenador y muchos de los jugadores de dos años atrás, más Sergio González, Nicolás Jiménez, Marcelo Dopico, Alfredo Juárez, Cristian Contreras, Humberto Lentz, Claudio Mir (goleador con 11 tantos), y Daniel Dobrik, entre otros, logró volver tras 23 partidos, 14 triunfos, 5 empates y apenas 4 derrotas.
Actualmente Antoniana sigue en el Argentino A y en la última fecha perdió con Talleres de Córdoba, con quien comparte la zona 2, además de Crucero del Norte, Central Córdoba de Santiago del Estero, Racing de Córdoba, Unión Sunchales, Libertad de Sunchales y Sportivo Belgrano. El Santo está tercero con 19 puntos, detrás de Talleres (26) y Crucero del Norte (20). Y mañana visita a Patronato de Entre Ríos, en el partido interzonal.

Fuente: www.clarin.com del día 27/03/2010.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Formación del Santo para enfrentar a Patronato de Paraná

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martes, 23 de marzo de 2010

Ermini se queda en Juventud Antoniana pero recibirá una sanción económica

domingo, 21 de marzo de 2010

"La ausencia de Ermini influyó en el juego"

Juventud Antoniana 1 - 2 Talleres de Córdoba.

"Las oportunidades son como los amaneceres: si uno espera demasiado, se los pierde", sentencia W.G. Ward. Eso pasó exactamente con Juventud Antoniana en su derrota como local ante el ambicioso equipo de Talleres de Córdoba. Es que el cuadro "santo" no aprovechó sus oportunidades y después demoró demasiado en darse cuenta de lo que necesitaba para revertir un resultado que le era adverso. Pero fue demasiado tarde. De todos modos, estaba visto que no era la tarde de Juventud Antoniana. Perder a su goleador Héctor Arrigo a los ocho minutos de iniciado el partido por una lesión, sufrir una expulsión, la de Loeschbor en la misma etapa, y estrellar tres veces la pelota en el travesaño, son algunos de los elementos que atentaron contra su desempeño y por ende, tuvieron incidencias en el resultado final. Enfrente, de hecho, no tenía un rival cualquiera, se trataba del líder del torneo, de un equipo ambicioso, bien estructurado y con algunas individualidades muy interesantes. Casi como un equipo de B Nacional. Y como tal no vino a Salta a defenderse, sino a buscar el partido. Por eso salió a jugar con línea de tres en defensa, por eso apostó a un juego ofensivo con un enganche bien definido y con dos bien de punta. Juventud, de todos modos, encaró el partido sabiendo lo que tenía enfrente y no se amilanó ante el golazo de Pereira. Por el contrario, con más ahinco que ideas, salvó el atrevimiento del pibe Marcos Navarro para encarar, se fue en busca de la igualdad. Y la consiguió -menos mal- después que la pelota se estrellara por tercera vez en los palos del buen arquero cordobés. El bombazo de Acosta llegó justo cuando se acababa la primera etapa. Un alivio. Pero todo se volvió cuesta arriba apenas comenzó el complemento. Porque apareció un tal Cosaro y metió un formidable cabezazo para el segundo de Talleres. Ahí comenzó otra historia, porque Juventud tuvo que modificar el planteo y cambiar piezas. Entonces dispuso achicar la defensa, reforzar el medio y apoyar más la gestión ofensiva de Navarro. Y arremetió con todo, obligando a Talleres a cometer infracciones, por lo que se quedó con 9 jugadores por las expulsiones de Monai y Martinelli. Pero Juventud siguió desperdiciando sus oportunidades, como un cabezazo de Fernández u otro bombazo de Acosta. Así hasta el final, así el destino le marcó un nuevo traspié.

Lo que dejó el partido
Las palabras expresadas de los protagonistas una vez finalizado el encuentro marcaron de alguna manera, además, una postura con respecto al tema del jugador Facundo Ermini. Para el mismo técnico escucharlo decir que con "Ermini hubiera sido otro el juego antoniano", sonó hasta un poco a excusa pero se justificó diciendo que el trabajo semanal estaba preparado en función del juego que tiene el futbolista.
Mientras, que sus compañeros no dudaron en responder que "Facundo es el plantel", un respaldo mancomunado que muestra que para muchos la decisión tomada por parte de los dirigentes de apartarlo del equipo fue apresurada e inoportuna. Esta semana, sabremos a que resolución llega la CD con respecto a este tema.

Fuente: El tribuno. Foto: Nuevo Diario