sábado, 3 de septiembre de 2011

Entre el fracaso y el cambio

En Juventud Antoniana se preparan para las elecciones del 16 de septiembre.

Con fecha estipulada y dos listas consolidadas, en el Santo no esperan otra cosa que el socio decida y elija quiénes estarán al frente de la Institución de calle Lerma y San Luís durante los próximos dos años. El Argentino A está en marcha pero el futuro Institucional está en juego. ¿Qué tanto puede cambiar el panorama futbolístico con una renovación o no de autoridades en el Club?
“Día tras día los tiempos cambian y son nuevas las mañanas, cada hombre joven con sus fuerzas ya quieren la tierra libre pisar”; dice la estrofa de la canción “Cada día somos más”, de León Gieco. Y vaya que fueron muchos días los que pasaron para que se llegue a definir la fecha de las elecciones en Juventud Antoniana. La decisión final, se llevó a cabo en un contexto de entre idas y vueltas, situaciones de sumo hermetismo, definiciones judiciales y todos los condimentos propios de una lucha interna que se vive en el Club por mantener el poder y los otros por buscar el ansiado cambio.
Steven Spielberg, seguramente, podría escribir el mejor guión para una película de suspenso y terror si estuviera inmerso en la realidad Santa y no dudaría en titularla: “El poder y la tentación hecha antoniana”. Finalmente, el próximo 16 de septiembre se llevarán a cabo las elecciones en Juventud con dos listas que se mantienen firmes: “Azul, marrón y blanco”, encabezada por Rubén Gonzáles y Mariano Mera Figueroa y “Por un Juventud Nacional”, liderada por Jorge Guaymás y Julio Dagun.
Después del 16, se pondrá en marcha el rodaje de la película más esperada por todos los antonianos, estará en la decisión del socio elegir quiénes serán los protagonistas del microfilme de calle Lerma y San Luís.
Hasta el momento, mucho se dijo y poco se hizo en el Centro Juventud Antoniana, y la multiplicidad de discursos vertidos en los medios de comunicación, durante estos últimos meses, fueron variando de tal manera que nos topamos ante individuos que se pusieron en la mismísima piel de personajes conocidos de la historia cinematográfica.
Fueron desfilando dirigentes de la Escuela del terror, con un perfil similar a El Padrino, otros más sanguinarios eligieron ser Chucky, los que tienen sed de venganza se vistieron de Fredy Kruger, y los que están “armados” de viejos rencores y de pocas ideas fueron los Frankesteins, en esta historia de puja de poderes. Pero la afición pide a gritos aires de Woody Allen, con su romanticismo y su fiel realidad.
Pero más allá de toda el “agua que corrió debajo del puente” la idea de un CAMBIO sigue tan latente y presente como los latidos de ilusión y alegría en cada corazón antoniano viviendo los inicios de este nuevo Campeonato del Argentino A.
“Día tras día se abre la esperanza de que tenga cada uno un lugar, mentes calladas ya despiertan a latidos de sus almas”; es hora de que el socio se despierte, mire hacia a su alrededor, observe al Club de sus amores, analice con paciencia, seguridad y se pregunte: ¿Qué es lo que quiero para Juventud Antoniana? ¿Siento que el Club creció de manera notoria en los últimos 5 años? ¿Me siento partícipe con mi opinión en cuestiones relacionadas al crecimiento de la Institución? ¿Veo más aciertos que fracasos en el plano futbolístico? ¿Observo un desarrollo notable en las divisiones inferiores? ¿Percibo que se manejaron de una manera clara en asuntos Institucionales con los socios? Realmente ¿Siento confianza y esperanza en apostar por lo mismo o prefiero algo nuevo?
El asociado tendrá muchos interrogantes para responderse hasta el mismo día que se encuentre a solas dentro del cuarto oscuro pensando en el porvenir de la Institución. “Todos canten, todos gritan, todos vivan que estos son tiempos de pensar y cada día somos más que estos son tiempos de pensar y cada día somos más”; termina diciendo la canción de Gieco. El pueblo santo está de fiesta porque volverá a vivir un acto electoral de manera democrática después de 40 años. El sueño de un Juventud grande de verdad es el anhelo de todos, y va más allá de diferencias ideológicas y de banderas políticas. En esta ocasión, se deberá proceder con el corazón pero también con la inteligencia porque está en juego el futuro del Club, el crecimiento de las inferiores, el éxito futbolístico y la participación activa y plena de cada uno de los antonianos sintiendo cada uno como suyo el Honorato Pistoia.

El Chat de los Antonianos